La PAC posterior a 2013 debe contar con financiación suficiente y garantizar una redistribución equitativa de los recursos, según un informe aprobado por el Parlamento Europeo en su sesión del pasado jueves. Los diputados defienden un sistema de ayudas directas a los agricultores basado en criterios ambientales y sociales y piden abandonar los valores de referencia históricos. Estas propuestas buscan influir en la propuesta legislativa que la Comisión presentará en otoño.
El informe aprobado por el PE, y presentado por el europarlamentario alemán Albert Dess, defiende una PAC fuerte y dotada de recursos suficientes y se opone con firmeza a toda iniciativa de renacionalización de la política agraria a través de la cofinanciación de los pagos directos. Los diputados reclaman que el presupuesto agrícola de la UE para el periodo 2014-2020 se mantenga a la altura del año 2013. Además, abogan por una distribución justa de los recursos para el primer y el segundo pilar (ayudas directas y desarrollo rural) tanto entre los Estados miembros como entre los agricultores de cada país.
Abandono gradual del criterio histórico
El informe respalda el “abandono progresivo de las referencias históricas desfasadas en la actualidad” y su sustitución gradual por “ayudas equitativas y mejor repartidas entre los países, los diferentes sectores agrícolas y los agricultores”. Los diputados rechazan el pago directo de un porcentaje uniforme a tanto alzado en el conjunto de la UE, pues “ello no reflejaría la diversidad europea” y proponen tener en cuenta las condiciones específicas de producción en los Estados miembros mediante “un sistema más focalizado de pagos directos”.
La Eurocámara es favorable a un régimen de pago único por explotación, que daría como resultado un reparto más equitativo de los pagos directos a nivel europeo. Por ello, propone que cada Estado miembro reciba un porcentaje mínimo de la media de pagos directos de la UE y que también se establezcan límites máximos.
En línea con lo anterior, los diputados piden que se abandonen los valores de referencia históricos y particulares de cada explotación y sugieren que en el próximo periodo financiero se pase a un sistema de prima por superficie regional o nacional para los pagos disociados.
El nuevo sistema de ayudas directas a los agricultores debe estar desligado de la producción y basarse en criterios sociales y ambientales. Además, el texto apoya reducir progresivamente los pagos directos en relación con el tamaño de la explotación agrícola, que tenga en cuenta criterios objetivos de empleo y prácticas sostenibles.
Derechos de plantación de viña: Los eurodiputados instan a la Comisión a que considere mantener los derechos de plantación en el sector del vino después de 2015 y a que tenga en cuenta esta posibilidad en su informe de evaluación sobre la reforma de la OCM del vino previsto para 2012.
Frutas, hortalizas y aceite: El PE considera necesario reforzar los sistemas de gestión en el sector de las frutas y hortalizas (cítricos y todos los productos afectados), del vino y del aceite de oliva. Igualmente, cree necesario un fondo de crisis más eficaz en el sector de las frutas y hortalizas, una mejor gestión de crisis en el sector del vino y un sistema de almacenamiento privado actualizado en el sector del aceite de oliva.
Leche: El Parlamento Europeo insiste en la necesidad de evaluar la situación específica del sector de la leche y de los productos lácteos antes de marzo de 2015, con el objetivo de asegurar el buen funcionamiento y la estabilidad del sector. Por otra parte, los diputados subrayan el carácter central de la producción lechera para la agricultura europea y para la subsistencia y el mantenimiento de las zonas rurales. El informe pide a la Comisión que "siga atentamente y permita el desarrollo del mercado de los productos lácteos dedicando suficientes instrumentos políticos a la leche y los productos lácteos en el periodo posterior a 2015 y con un marco de competencia leal que garantice una posición firme a los productores primarios y una distribución más equilibrada de los ingresos a lo largo de la cadena de producción".
Azúcar: La Eurocámara aboga por que el régimen del mercado del azúcar de 2006 se prorrogue en su forma actual hasta 2020 como mínimo, y pide medidas adecuadas para salvaguardar la producción azucarera en Europa, de forma que este sector pueda incrementar su competitividad dentro de un marco estable.
Regiones ultraperiféricas: Los diputados creen que las regiones ultraperiféricas deben seguir beneficiándose de un trato específico dentro de la política de desarrollo rural, ya que “las dificultades geográficas a las que se enfrentan y la escasez de producciones agrícolas de las que depende la economía rural de estas zonas justifican el mantenimiento de una tasa de cofinanciación comunitaria de hasta el 85% para sufragar el coste de sus programas de desarrollo rural”.
Pequeñas explotaciones: El informe sugiere crear un régimen especial para los titulares de pequeñas explotaciones agrícolas y subraya la necesidad de diversificar los ingresos de estas explotaciones, desarrollar su gestión empresarial y crear nuevos puestos de trabajo en el ámbito rural.
Acuerdo UE-Mercosur: Los eurodiputados piden a la Comisión que presente una evaluación de impacto de todas las negociaciones comerciales actualmente en curso, incluido el Acuerdo de Asociación UE-Mercosur, “que no deben afectar negativamente a los países en desarrollo ni socavar la eficacia de la PAC en el horizonte 2020”.
Empleo y situación social en el sector agrícola
El PE subraya que los ingresos de la agricultura son claramente inferiores a los del resto de los sectores económicos (un 40% menos por unidad de trabajo, según algunas estimaciones), la renta por habitante en las zonas rurales es considerablemente más baja que en las zonas urbanas (aproximadamente un 50%), y, según los datos de Eurostat, el empleo en el sector agrícola ha descendido un 25% entre 2000 y 2009.
Además, el informe recuerda que solo el 6% de los agricultores europeos tienen menos de 35 años y que 4,5 millones de agricultores se jubilarán en los próximos 10 años. Los diputados consideran que las medidas tomadas hasta ahora no han sido suficientes para detener el rápido envejecimiento de la población en el sector agrícola. Por este motivo, solicitan que se presenten propuestas para invertir esta tendencia.
Por otra parte, los diputados recalcan que a los dos cónyuges que trabajan en una explotación se les deben garantizar los mismos derechos. Cerca del 42% de los 26,7 millones de personas que trabajan en la agricultura en la UE son mujeres, pero solo una de cada cinco explotaciones (alrededor del 29%) es gestionada por una mujer.
Fuente: Servicio de Prensa del Parlamento Europeo